Algo interesante que quisiera compartir con respecto a la a realidad imaginada es la historia de un Obispo del Vaticano que hace un par de años atrás, publicó una carta dirigida especialmente a los jóvenes, donde él por una parte, explica las dichas que obtuvo gracias a la creencia en Dios y por otra parte, explica que una persona, incluso, puede lograr tener más "bendiciones" a partir de que gracias a la creencia de algo (no necesariamente Dios) las cosas funcionan de mejor manera. Es decir, la creencia no en el objeto o en algo materializado como un ser supremo, sino en el impacto que puede establecerse gracias a la creencia de algo. Este Obispo establecía que científicamente no había ninguna sola prueba de que Dios haya existido, pero la creencia en él, conformo una serie de regulaciones y normas sociales que permitió un mejor desarrollo de la persona en todo ámbito. Esto es algo sumamente interesante, ya que pensar que un día se demuestre que Dios nunca existió, sera ...